Un consorcio de Smartec (empresa perteneciente a Roctest) y HBM FiberSensing han firmado la fase II del proyecto ITER (Reactor Termonuclear Experimental Internacional). Está previsto que suministren sistemas de sensores de fibra óptica para instalar en el nuevo reactor de fusión Tokamak, que actualmente se encuentra en construcción en Cadarache, Francia.
Este es uno de los mayores encargos que ha recibido FiberSensing hasta el momento y que pone de relieve la creciente importancia y aumento de oportunidades de mercado que suponen las soluciones de fibra óptica.
Ambas compañías ganaron la licitación ITER para la cualificación y la entrega de sistemas de sensores ópticos basados en la tecnología de fibra con rejilla de Bragg e interferómetros de Fabry-Pérot. Estos sistemas miden la deformación, el desplazamiento y la temperatura en un entorno extremadamente frío (criogénico), tal como tiene lugar en los imanes del ITER.
El proyecto para la fusión nuclear ITER es un experimento científico a gran escala. Su objetivo es desarrollar una nueva fuente de energía, más limpia y sostenible, produciendo energía de forma comercial mediante fusión nuclear -el mismo proceso que tiene lugar en el interior del sol.
Las empresas suministrarán sensores ópticos de deformación, desplazamiento y temperatura para su instalación en bobinas y diversas estructuras mecánicas. La primera fase del trabajo incluyó la adaptación y la cualificación de los sensores, instrumentos de medición y software para las condiciones específicas de los imanes superconductores del ITER. La segunda fase incluye la producción en serie, entrega e instalación de los sistemas de sensores. En total, los dos contratos prevén el suministro de 900 sensores y sus correspondientes sistemas de adquisición de datos, así como los accesorios, tales como cables y software.
HBM FiberSensing y Smartec están convencidos de que los sensores cualificados en el marco de este programa también serán adecuados para otras mediciones en ambientes criogénicos y aquellos con alta radiación.
Este es uno de los mayores encargos que ha recibido FiberSensing hasta el momento y que pone de relieve la creciente importancia y aumento de oportunidades de mercado que suponen las soluciones de fibra óptica.
Ambas compañías ganaron la licitación ITER para la cualificación y la entrega de sistemas de sensores ópticos basados en la tecnología de fibra con rejilla de Bragg e interferómetros de Fabry-Pérot. Estos sistemas miden la deformación, el desplazamiento y la temperatura en un entorno extremadamente frío (criogénico), tal como tiene lugar en los imanes del ITER.
El proyecto para la fusión nuclear ITER es un experimento científico a gran escala. Su objetivo es desarrollar una nueva fuente de energía, más limpia y sostenible, produciendo energía de forma comercial mediante fusión nuclear -el mismo proceso que tiene lugar en el interior del sol.
Las empresas suministrarán sensores ópticos de deformación, desplazamiento y temperatura para su instalación en bobinas y diversas estructuras mecánicas. La primera fase del trabajo incluyó la adaptación y la cualificación de los sensores, instrumentos de medición y software para las condiciones específicas de los imanes superconductores del ITER. La segunda fase incluye la producción en serie, entrega e instalación de los sistemas de sensores. En total, los dos contratos prevén el suministro de 900 sensores y sus correspondientes sistemas de adquisición de datos, así como los accesorios, tales como cables y software.
HBM FiberSensing y Smartec están convencidos de que los sensores cualificados en el marco de este programa también serán adecuados para otras mediciones en ambientes criogénicos y aquellos con alta radiación.
